ARGENTINA
CAPITAL FEDERAL
HOY-ES
OtrosBlogs -
MisPapers -
MisNotas -
Vínculos -

jueves, febrero 28, 2019

La Razón Pura de la Libertad

Inmanuel Kant sostiene que "la libertad es el concepto clave que determina la autonomía de la voluntad." "La voluntad" dice Kant "es una clase de causalidad que pertenece a los seres racionales", y "la libertad" o liberación, "sería esa propiedad de tal causalidad que ella puede ser eficiente independientemente de las causas externas que la determinan." Para contrastar este rasgo libre (la independencia) de la voluntad respecto a factores externos, Kant agrega: "justo como la necesidad física es la propiedad que la causalidad de todos los seres irracionales ha de ser determinada por factores externos." Dada la voluntad, la acción humana es, en última instancia, libre de factores externos; mientras que el accionar de los seres irracionales queda, dada la necesidad física, completamente determinado por causas externas. Los seres irracionales se mueven por necesidad mientras que a los seres humanos los mueve la libertad.

Esta noción Kantiana de la libertad es negativa, pues sostiene que es una propiedad de un complejo causal en donde no reinan las causas externas, no queda determinada por leyes físicas. Además, esto se contrapone con la necesidad física, en donde el complejo causal completo es externo, completamente determinado por leyes físicas. Dicha noción negativa de la libertad no da ninguna idea sobre la naturaleza de las causas en sí, por lo que Kant se vio obligado a postular una noción positiva que permita analizar y descubrir las características de esta propiedad, y así establecer las leyes inmutables que gobiernan la voluntad.

La necesidad física es heterónoma mientras que la voluntad es autónoma, dice Kant. "La necesidad física es una heteronomía de las causas eficientes porque cada efecto solo es posible de acuerdo a la ley de que algo determina que las causas eficientes ejerzan la causalidad." Que un complejo causal sea heterónomo en causas eficientes quiere decir que algo, externo al complejo, da el puntapié inicial al ejercicio efectivo de la causalidad de dichas causas. Esto no ocurre en la voluntad. El complejo causal de la voluntad no se rige por tal ley externa, pues en tal caso sería indistinguible de la necesidad física. Lo que queda, entonces, es la autonomía respecto a leyes externas. La voluntad -sus leyes y principios- es autónoma.

¿Cuál es la ley que gobierna esa causalidad.? La voluntad, dice Kant, posee la propiedad de ser una ley en sí misma: "la voluntad es en cada acción una ley en sí misma, solamente expresa el principio: actuar sobre ningún otro máximo que aquel que puede tener al objeto en sí mismo como una ley universal." "Esta es precisamente la fórmula del imperativo categórico y es el principio de moralidad, tal que una voluntad libre y una voluntad sujeta a las leyes morales son exactamente lo mismo." La libertad y los principios morales de la voluntad son equivalentes. Es esa autonomía moral de la voluntad, lo que hace libre al ser humano.

La autonomía de la voluntad, presupone pureza de la moralidad. Es decir, esas leyes morales y sus principios se derivan a priori, de la concepción misma de la razón pura. Dichas leyes son puras, no poseen ningún vestigio empírico, de lo contrario no podrían ser autónomas. El estudio de las mismas se denomina metafísica de la moral o filosofía pura de la moral. Tal filosofía pura, no solo permite estudiar la fuente última del conocimiento práctico sino también detectar las verdaderas leyes morales y así prevenir,al individuo, de la corrupción moral.

Una moral corrupta, contaminada con principios empíricos, puede provocar acciones que contradicen la verdadera moral o que no devienen de ella. Por ello importa disponer de una ciencia de la moral. La metafísica de la moral -la filosofía de la moral- provee el único acceso a la verdadera moral, siendo esta moral el oráculo puro de la voluntad. Luego la voluntad, regida por estas leyes puras, dada su autonomía, determinará la acción, para construir de esta forma los principios del conocimiento práctico del ser humano. Es la metafísica quien nos revela la fuente última de la acción humana, la fuente última del conocimiento práctico.

La verdadera libertad no se constituye sobre una moral corrupta. ¿cuáles son, entonces, esos preceptos, principios y leyes morales? ¿en qué consisten.? Son las leyes morales, no la falsa moral, lo que vuelve libre al hombre. Es la pureza de esas leyes el rasgo distintivo de la libertad, el rasgo distintivo de la autonomía de la voluntad. El hombre, aunque se educa al vivir en libertad, no aprende a ser libre sino que nace libre. Esto es así porque solo existe la razón pura de la libertad.

No hay comentarios: